

El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que el Banco Mundial otorgará un préstamo por 4.000 millones de dólares a la Argentina en los próximos meses. La confirmación llegó después del encuentro entre Javier Milei y Donald Trump en Nueva York, en el marco de la Asamblea General de la ONU, donde el expresidente estadounidense le expresó al mandatario argentino su “total apoyo para la reelección».
El gobierno celebró el anuncio como un gesto de confianza internacional hacia el rumbo económico, aunque lo cierto es que el nuevo crédito vuelve a incrementar la pesada carga de deuda que arrastra el país.
Luis Caputo destacó que el dinero se enmarca en un paquete mayor de 12.000 millones de dólares comprometidos por el Banco Mundial y que estará destinado a “impulsar la minería, fortalecer a las pymes, expandir el acceso a la energía y promover el turismo como motor de empleo”.
Según el ministro, el respaldo demuestra “fuerte confianza” en los esfuerzos del gobierno para “modernizar la economía, atraer inversiones y crear trabajo”. No obstante, todos los desembolsos están sujetos a la aprobación de la Junta de Directores Ejecutivos del organismo, lo que en los hechos condiciona las políticas nacionales a la mirada externa.
Previo a la reunión bilateral, Donald Trump publicó un mensaje en su red social Truth donde aseguró que Javier Milei “ha devuelto la estabilidad a la economía” y remarcó que tiene su “total apoyo” para continuar en el poder.
El gesto político del republicano fue replicado y celebrado por el propio Milei en redes sociales, consolidando una alianza que trasciende lo económico y proyecta un fuerte alineamiento con Washington en plena campaña electoral camino a las elecciones de octubre.
Aunque el oficialismo insiste en que “Estados Unidos no pidió nada a cambio”, el camino elegido refuerza la dependencia de Argentina respecto de los organismos financieros internacionales y del respaldo político norteamericano.
Con reservas escasas, un esquema cambiario en tensión y una economía en recesión, el nuevo préstamo no resuelve los problemas de fondo: apenas ofrece oxígeno financiero a costa de engrosar la deuda externa y comprometer aún más la soberanía económica.
El panorama sigue siendo complejo: mientras Milei cosecha apoyo externo y fotos con Trump, lo que queda en evidencia es que el futuro inmediato del país se ata a más crédito y a mayores exigencias desde el exterior.
Con información de C5N.